Fotoqueratitis
¿En qué consiste la Fotoqueratitis?
La Fotoqueratitis es una enfermedad de los ojos se la conoce popularmente como "ceguera de la nieve". Se le da este nombre porque la fotoqueratitis es más común en las zona cercanas al polo Norte y al polo Sur, donde la radiación ultravioleta se ve ampliada por el reflejo en la nieve. También se puede dar en zonas de alta montaña. Se producen úlceras en la córnea debido a los efectos de los rayos ultravioleta.
Síntomas de la Fotoqueratitis
Al margen de las quemaduras en uno o en ambos ojos, que van relacionadas con el dolor y con el enrojecimiento, también pueden manifestarse otros síntomas de la Fotoqueratitis, como por ejemplo la inflamación, la visión borrosa o el lagrimeo ocular. Y, sobre todo, el hipema, que es el sangrado en la cámara anterior del ojo, o incluso las hemorragias dentro del ojo.
Otra actividad que puede producir Fotoqueratitis es realizar soldaduras metálicas donde se producen unos rayos de luz muy fuertes. Es necesario siempre proteger los ojos con un casco de soldador para no dañar la córnea.
Síntomas de la Fotoqueratitis
- Dolor.
- Enrojecimiento de los ojos.
- Úlceras en la córnea.
- Inflamación de los ojos.
- Visión Borrosa.
- Lagrimeo ocular.
- Hipema o sangrado interior del ojo.
Causas que provocan la Fotoqueratitis
La principal causa de la Fotoqueratitis es la sobreexposición a una luz ultravioleta, o la luz UV, la cual puede proceder de una fuente natural como el sol, o incluso de una luz artificial como una lámpara de bronceado. El caso más habitual de todos es el reflejo de los rayos de sol al incidir directamente sobre una superficie, véase el agua, la nieve, el hielo, o incluso la arena. Por tanto, practicar deportes de nieve, adentrarse en el mar para pasar el día en un velero u observar el horizonte desde una playa y de manera prolongada, pueden suponer un riesgo para la salud ocular, salvo que se tomen las medidas preventivas pertinentes como el uso de unas gafas de sol con filtro UV 100%.
Otros ejemplos habituales que pueden provocar la aparición de una Fotoqueratitis en uno o en ambos ojos son las zonas con alta densidad de rayos UV, como el polo Norte o el polo Sur; o aquellos donde la densidad del aire sea menor, ya que esto aporta menos protección frente a la radiación ultravioleta, como es el caso de la alta montaña. Además, mirar directamente un eclipse solar es otra de las causas de una quemadura en la retina.
Grados de Fotoqueratitis
Podríamos dividir los tipos de Fotoqueratitis en 4 niveles o grados, en función de la cantidad de la cámara ocular que se haya visto afectada por la quemadura y, por tanto, de la gravedad de la misma.
- Fotoqueratitis de grado I. Es la más leve de todas, afecta como máximo al 33% de la cámara anterior del ojo y se manifiesta con un hipema, o la presencia de sangre, en la zona frontal.
- Fotoqueratitis de grado II. Afecta a un porcentaje mayor, que oscila entre un 33 y un 50% del área de la cámara anterior del ojo. Requiere una atención más detallada con el fin de controlarla lo antes posible y para minimizar cualquier efecto secundario.
- Fotoqueratitis de grado III. Este tipo de fotoqueratitis es bastante grave, ya que afecta a casi toda la cámara anterior del ojo. Si no se trata a tiempo, se puede llegar a perder bastante visión en el ojo.
- Fotoqueratitis de grado IV. Se trata del caso más extremo, ya que manifiesta un hipema total en el ojo. La atención médica es urgente.
¿Cómo se puede prevenir la Fotoqueratitis?
La Fotoqueratitis se puede prevenir si se toman determinadas precauciones con los ojos, sobre todo no exponerse a fuentes de radiación ultravioleta. Aunque muchas veces la prevención es la mejor medicina, por lo que conviene no abusar de los entornos con mucha luz ultravioleta, como zonas montañosas o nevadas, sobre todo si hay antecedentes familiares y al margen de que se tomen las medidas correspondientes.
No obstante, en caso de que se produzca la exposición, lo ideal es llevar siempre unas lentes de sol que bloqueen la radiación ultravioleta, unas que estén especialmente diseñadas para minimizar los riesgos absorbiendo al menos el 99% de la luz UV que llega a los ojos. Existen gafas para la nieve, ya sea para practicar algún deporte de invierno o para simplemente pasar un día en familia rodeado de este manto de color blanco.